El futuro de la alimentación: personalizada, funcional y más inteligente
La nutrición del futuro será personalizada, funcional e inteligente, adaptada a cada persona y basada en evidencia científica.
El futuro de la alimentación: personalizada, funcional y más inteligente
El mundo de la nutrición avanza a pasos agigantados, y el futuro apunta hacia una alimentación más personalizada, adaptada a las características únicas de cada persona. Ya no se trata solo de qué comemos, sino de cómo responde nuestro cuerpo según nuestra genética.
Nutrición personalizada: una dieta hecha para ti
La llamada nutrición personalizada es uno de los grandes avances que vienen. Gracias a disciplinas como la nutrigenómica (que estudia cómo los nutrientes afectan la actividad de nuestros genes) y la nutrigenética (que analiza cómo nuestras variaciones genéticas influyen en la forma en que procesamos los alimentos), será posible ajustar la dieta para prevenir o incluso tratar ciertas enfermedades de manera más eficaz. En otras palabras: lo que a una persona le hace bien, puede no ser lo ideal para otra.
¿Qué son los alimentos funcionales?
Cada vez vemos más productos en el supermercado que prometen algo más que alimentar: ayudar al corazón, mejorar las defensas o bajar el colesterol. Son los llamados alimentos funcionales, que han sido modificados para incluir (o reducir) ciertos componentes con efectos positivos en la salud. Por ejemplo: yogures con probióticos, margarinas con esteroles vegetales, o cereales con más fibra.
Estos alimentos ni reemplazan una dieta equilibrada ni un tratamiento médico. Además, pueden tener riesgos si se consumen en exceso o sin supervisión ya que pueden afectar la absorción de otros nutrientes.
¿Y los nutracéuticos?
A diferencia de los alimentos funcionales, los nutracéuticos son suplementos (en forma de cápsulas, polvos, etc.) que concentran sustancias presentes en los alimentos.
En definitiva, la nutrición del futuro será más inteligente y adaptada a cada persona, pero también exigirá estar bien informado. Lo importante será siempre mantener una dieta variada, equilibrada y basada en evidencia científica.
Fuente: Medicina de Familia SEMERGEN